domingo, 19 de febrero de 2012

Terapia Craneosacral

La terapia cráneosacral es una terapia creada a partir de la osteopatía craneal de W. G. Sutherland, posteriormente desarrollada por John Upledger y Franklyn Sills. Ellos postulaban que en el interior del cráneo existe un ritmo respiratorio que consiste en unas suaves pulsaciones de aproximadamente 6 a 12 ciclos por minuto, producido por la fluctuación del líquido céfalo raquídeo. Este líquido circula por la membrana dural rodeando los huesos craneales, envolviendo al cerebro, médula espinal y todos los nervios raquídeos, expandiéndose así por todo el organismo. El recorrido de este líquido lo hace bajando desde el cráneo por la médula espinal hasta el sacro y viceversa, hasta nuevamente llegar al cráneo. Es por esta razón por la que los huesos craneales y sacro entre otros, tienen movimiento propio permitiendo un movimiento de expansión y contracción, afectando a órganos y tejidos corporales.
   A demás de estas suaves pulsaciones por minuto, existen otros movimientos craneales aún mas suaves y profundos llamados mareas, que serán las que mas nos acompañen durante el trabajo cráneosacral a demás de ser fundamentales para el trabajo biodinámico. El papel de los fluidos, en este caso el líquido céfalo raquídeo desempeñan una función importante en la distribución de nuestra potencia biodinámica.

¿En qué consiste la terapia Craneosacral?

La terapia cráneosacral, es una técnica manual muy sutil que ayuda al cuerpo a restablecer sus procesos naturales de equilibrio y curación. La técnica de palpación y trabajo del terapeuta es muy suave y esto permite ayudar a liberar al cuerpo sus resistencias y bloqueos. Esta palpación puede realizarse en diferentes puntos del cuerpo (cráneo, sacro, pies, diafragma) desde la cual vamos a recibir los diferentes estados de tensión. El terapeuta cráneosacral detecta e interpreta estos ritmos de expansión y contracción y mediante una delicada palpación, recibiendo información de todo el organismo a modo de ritmos, pulsaciones, ondulaciones, etc. De esta manera detectamos las zonas de bloqueo o resistencia. La falta de movilidad en ciertas áreas de este ritmo, indica una disfunción en esa zona.